de 1 en 1

Pequeños cuentos,frases o videos de gran ayuda para el Alma.

jueves, 17 de diciembre de 2015

Microcuento (Porque)

Porque contigo no es cuando te beso, es cuando te abrazo.
Porque contigo no es estar a tu lado, es sentir tus latidos.
Porque contigo no es sentir tu piel, es sentir tu alma.

Porque contigo no es estar feliz, es amar.

martes, 15 de diciembre de 2015

Alma Soñada

Perdido, entre el amor y ella,
entre lo que siento y lo que necesita,
entre hablar y callar.
Así me siento, cada vez que la conozco más la quiero,
cada minuto que la veo, su belleza es mayor.
Podría estallar una guerra, que si me lo pide me presento en línea de batalla, por ella.
Es mi musa, es mi sueño, es mi amiga.
La quiero como amiga, la amo como más.
La veo sonreír y mi día es pleno.
La veo llorar y se me cae el mundo.
Me habla de otros y me muero.

Todos saben, todos te aconsejan, todos te protegen.
No te precipites, díselo, calla, olvida...
Todos sabemos cuando no es nuestro,
Todos opinas de lo de otros.
Ella está incrustada en lo hondo de mi ser,
Es mi alma y mi todo.
Cada minuto a su lado es para mi una eternidad.
Acariciar su mano, un pecado dispuesto a cometer,
Mirar sus ojos, es conocer su alma,
Mirar su rostro, conocer lo que otros ven, pero querido amigo, ella no es eso.

Y ¿Qué es ella?
Ella es locura y cordura,
dulzura y enfado,
alegría y pena,
fuerza y debilidad,
amor y desilusión,
energía y agotamiento.
Dos caras de la misma moneda,
dos visiones de una persona completa.
Que ahora te ríe y luego te llora,
que ahora te riñe y luego te abraza.
Esa locura que veo, la amo,
cuando no está, la extraño.

Es todo y nada,
Es al fin y al cabo,

Ese alma soñada.

jueves, 21 de junio de 2012

En lo profundo...



En lo profundo
no hay nada que no sea sorprendente.
Y sin embargo
bajamos tan a poco, y pocas veces.

Acomodamos
el pulso a la presión de la rutina.
Nos distanciamos
del fondo y del origen de los días…
… y no bajamos, y no bajamos, y no bajamos.

Nos olvidamos del sentido de la Vida,
del propio barro, del primer atardecer…
Y amontonamos un sinfín de tonterías,
buscando en lo que creer.

En lo profundo
no hay nadie que no sea diferente,
pero a menudo
mostramos sólo aquello que no duele.

Desdibujados
detrás de multitud de vanidades…
Tristes, sin sueños,
ajenos al Amor… superficiales.
…y no bajamos, y no bajamos, y no bajamos.

Nos olvidamos del sentido de la Vida,
del propio barro, del primer atardecer...
Y amontonamos un sinfín de tonterías,
buscando en lo que creer.

En lo profundo
no hay nada que no sea sorprendente...

Luis Guitarra

Comentario: Bajar hasta lo profundo para encontrase contigo mism@.

miércoles, 8 de febrero de 2012

¿No podríamos ser agua?- Maldita Nerea

Hoy después de un largo periodo de inactividad, vuelvo a escribir.
Quería volver con esta canción, especialmente, querria destacar el videoclip de este gran grupo.
Un videoclip que me ha encantado y me hace pensar. Espero que lo difruteis tanto a más que yo.



Estaba claro que no podíamos ser agua,
que lo que sientes no puede verse desde aquí,
unas palabras de aquella forma interpretada,
no tienen vida, no, ni tienen donde ir
donde ir, lo has olvidado:
La vida crece entre los matices
se esconde siempre lo que no dices
para hacerse de rogar
Un día claro, y aquellas cosas que no viviste
vienen hoy para decirte: que la fiesta empiece ya
yo empezaría por ser de los primeros, (¡Que va!)
Huyendo siempre de los no sinceros,
será aquel que solo sabe y recomienda:
hacer locuras sin que nadie entienda.
Y necesitas decir que no a los miedos, verás puedo enseñarte
lo que yo prefiero: unas gotitas ahí de amor del bueno;
No te preocupes besaré primero.

Aunque me canse, y vengan miles de días grises
o mis palabras quieran rendirse ante la lluvia en el cristal
me suena grande, los imposibles también existen,
son los que hoy me hacen decirte: que la fiesta empiece ya
pero a ver: que no, que no, que yo te quiero, te cambio un si por ese
yo no puedo, demasiadas canciones que ya no llegan...
suenan palabras que jamás las llenan.
(Instrumental)
¡Lo has olvidado! la vida crece entre los matices,
se esconde siempre lo que no dices para hacerse de rogar.
Un día claro, y aquellas cosas que no viviste,
vuelven hoy para decirte: quédate un ratito más
Pero a ver: que no, que no, que yo te quiero, te cambio un si por ese
ya no puedo: unas gotitas ahí de amor, de amor del bueno
no te preocupes, besare primero, aunque me canse y vengan miles de días grises
o mis palabras quieran rendirse ante la lluvia en el cristal
me suena grande, los imposibles también existen,
son los que hoy me hacen decirte: que la fiesta empiece ya…

viernes, 8 de abril de 2011

Para esa gente que siempre esta apoyandonos

Abandoné rápidamente el instituto. Estaba deseando llegar a casa para planear el fin de semana, había pensado jugar al futbol, acercarme a ver alguna peli con los amigos, y luego íbamos, seguramente, a organizar un campeonato de videojuegos en casa de Raúl.

A lo lejos vi también a un chico de mi clase caminando hacia su casa, su nombre era Iván, y me llamó mucho la atención que iba cargado con todos sus libros.
-¿Qué raro?, llevándose los libros en fin de semana, -pensé- debe de ser un empollón.
Curiosamente, no teníamos, ninguno de la clase casi trato con él.

Lo observé durante unos minutos y pude ver como se acercaba una pandilla de chavales. Le tiraron los libros que cargaba, y lo empujaron para que cayera al suelo, allí comenzaron a pisotearlo mientras se reían y lo insultaban.
Sus gafas salieron volando y pude ver como cayeron en la hierba a unos tres metros de él. Miró hacia arriba y observé una terrible tristeza en sus ojos.

Mi corazón dió un vuelco y no pude evitar salir corriendo hacia él, cuando llegué hasta su altura, todavía seguía arrastrándose por el suelo, intentando encontrar sus gafas.
Cuando me miró pude ver como las lágrimas empezaban a caer por sus mejillas, y mientras le entregaba sus gafas, le dije: - Esos tipos son unos idiotas, deberían ocuparse en algo.-

Iván se levantó y mientras se secaba las lágrimas, me miró y me dijo: -Oye, muchas gracias.-
Había una enorme sonrisa en su cara, era una de esas sonrisas que mostraba auténtica gratitud.
Le ayudé a recoger sus libros y le pregunté donde vivía. Resultó que vivía cerca de mi casa, así que le pregunté que por que no le había visto nunca por el vecindario.
Dijo que había ido a una escuela privada anteriormente, estuvo durante muchos años internado.

Mientras marchábamos hacia casa estuvimos charlando un buen rato. Resultó ser un chico muy agradable. Lo invité a jugar al fútbol conmigo y mis amigos el sábado por la mañana, y aceptó.
Pasamos juntos el fin de semana, y mientras más lo conocía, más me agradaba. Mis amigos pensaban igual.

Llegó la mañana del lunes, y hay estaba Iván, de nuevo con su enorme montón de libros. Le detuve y le dije que si continuaba así, iba a conseguir muy buenos músculos. El simplemente se rió y me paso la mitad de los libros.

Durante los siguientes cuatro años Iván y yo, nos convertimos en los mejores amigos.

Pasó el tiempo y el instituto terminó, había que pensar en la universidad. Iván eligió marcharse a estudiar a Estados Unidos, tendríamos que separarnos, pero yo estaba convencido de que siempre seríamos amigos, y que por muchos kilómetros que nos separarán, seguiría siendo así. La distancia nunca sería un problema.

El decidió convertirse en doctor, y yo me decanté por los negocios en las empresas.

Siempre pensé que era un empollón porque en la universidad, Iván sacaba siempre las mejores notas.

Pasados los años cuando llegaba su graduación, me llego una carta desde Estados Unidos con un billete de avión, Iván deseaba que estuviera presente cuando recibiera su diploma.

¡Vaya con el empollón! Mi amigo estaba estupendo en el estrado, le había tocado dar el discurso en nombre de los alumnos y no me extrañó. Los mejores hospitales se lo estaban sorteando. Había sacado las mejores notas, se había convertido en el alumno más popular y en el más ligón de la universidad, y se me provocaba algo de celos.

Desde el estrado, me dedicó un guiño, me sonrió, y pude leer en sus labios gracias.

Cuando le presentaron se acercó al estrado, aclaró su garganta y comenzó su discurso:
- El tiempo de graduación es el de agradecer- dijo con la voz calmada Iván – a aquellos que nos ayudaron a lograrlo, a través de aquellos años difíciles. Nuestros padres, nuestros maestros, nuestros hermanos, tal vez un entrenador, pero más que nada los amigos. Estoy aquí para decirle que se un amigo es el mejor regalo que puedes dar a alguna persona.-

-Les voy a contar una historia, un suceso que cambió mi destino.- prosiguió. – Un día decidí que no quería seguir viviendo, había planeado suicidarme un fin de semana. Y ese viernes decidí vaciar mi taquilla para que mi madre no tuviera que recogeros, y cargado de libros me marché hacia mi casa.- me miró profundamente y me regaló una sonrisa.

-Gracias A Dios fui salvado. Mi amigo que se encuentra allí sentado-dijo mientras me señalaba – me salvó de hacer una locura.- Oí una exclamación de la multitud mientras me apuntaban todas las miradas. Y vi a sus padres llorando, mirándome y sonriendome agradecidamente.
Hasta ese momento no me di cuenta de la importancia de aquel encuentro.






Nunca subestimes el poder de tus acciones, con un pequeño gesto puedes cambiar la vida de una persona. Para bien o para mal, nuestras acciones pueden afectar a otros de alguna manera.
Y recuerda los amigos son ángeles que nos ponen en pie cuando nuestras alas tienen problemas para recordar como volar

miércoles, 23 de febrero de 2011

Mi entorno (jesus adrian moreno)

 Pulsa para escuchar la canción.



NO SE DONDE COMIENZAS TU
NO SE DONDE TERMINO YO
MI ENTORNO SE LLENO DE TI
Y MI INTERIOR

Y MI MANERA DE PENSAR
Y MI MANERA DE SENTIR
CAMBIARON AL CRECER TU AMOR
DENTRO DE MI

Y NADA CAMBIARIA QUIERO ESTAR ASI
MURIENDO CADA DIA PARA VERTE EN MI

LLENAS MIS ESPACIO LLENAS MI VIDA
ME ILUMINASTE COMO EL SOL
QUIERO QUE CRESCAS Y TODOS LOS DIAS
SER UN REFLEJO DE TU AMOR

CON EL SONIDO DE MI VOZ
EL VIAJE EMPRENDERE POR TI
MIS PIES ME LLEVARAN A DONDE
QUIERAS IR

Y TODO LO QUE SOY SEÑOR
MIS PLANES Y MI CORAZON
HOY GIRAN A TU ALREDEDOR
RENDIDO ESTOY

Y NADA CAMBIARIA QUIERO ESTAR ASI
MURIENDO CADA DIA PARA VERTE EN MI

LLENAS MIS ESPACIO LLENAS MI VIDA
ME ILUMINASTE COMO EL SOL
QUIERO QUE CRESCAS Y TODOS LOS DIAS
SER UN REFLEJO DE TU AMOR

LLENAS MIS ESPACIO LLENAS MI VIDA
ME ILUMINASTE COMO EL SOL
QUIERO QUE CRESCAS Y TODOS LOS DIAS
SER UN REFLEJO DE TU AMOR

ERES MI ENTORNO
ERES MI VIDA
ME ILUMINASTE COMO EL SOL

martes, 9 de noviembre de 2010

El Buscador

el buscador (pincha para escuchar el cuento)

Esta es la historia de un hombre al que yo definiría como buscador
Un buscador es alguien que busca. No necesariamente es alguien que encuentra. Tampoco esa alguien que sabe lo que está buscando. Es simplemente para quien su vida es una búsqueda.
Un día un buscador sintió que debía ir hacia la ciudad de Kammir. Él había aprendido a hacer caso riguroso a esas sensaciones que venían de un lugar desconocido de sí mismo, así que dejó todo y partió. Después de dos días de marcha por los polvorientos caminos divisó Kammir, a lo lejos.  Un poco antes de llegar al pueblo, una colina a la derecha del sendero le llamó la atención. Estaba tapizada de un verde maravilloso y había un montón de árboles, pájaros y flores encantadoras. La rodeaba por completo una especie de valla pequeña de madera lustrada… Una portezuela de bronce lo  invitaba a entrar. De pronto sintió que olvidaba el pueblo y sucumbió ante la tentación de descansar por un momento en ese lugar. El buscador traspaso  el portal y empezó a caminar lentamente entre las piedras blancas que estaban distribuidas como al azar, entre los árboles. Dejó que sus ojos eran los de  un buscador, quizá por eso descubrió, sobre una de las piedras, aquella inscripción … "Abedul Tare, vivió 8 años, 6 meses, 2 semanas y 3 días". Se sobrecogió un poco al darse cuenta de que esa piedra no era simplemente una piedra. Era una lápida, sintió pena al pensar que un niño de tan corta edad estaba enterrado en ese lugar… Mirando a su alrededor, el hombre se dio cuenta de que la piedra de al lado, también tenía una inscripción, se acercó a leerla  decía "Llamar  Kalib, vivió 5 años, 8 meses y 3 semanas". El buscador se sintió terrible mente conmocionado.  Este hermoso lugar, era un cementerio y cada piedra una lápida. Todas tenían inscripciones similares: un nombre y el tiempo de vida exacto del muerto, pero lo que lo contactó con el espanto, fue comprobar que, el que más tiempo había vivido, apenas sobrepasaba 11 años. Embargado por un dolor terrible, se sentó y se puso a llorar. El cuidador del cementerio pasaba por ahí y se acercó, lo miró llorar por un rato en silencio y luego le preguntó si lloraba por algún familiar. dijo el buscador - ¿Qué  pasa con este pueblo?, ¿Qué cosa tan terrible hay en esta ciudad? ¿Por qué tantos niños muertos enterrados en este lugar? ¿Cuál es la horrible maldición que pesa sobre esta gente, que lo  ha obligado a construir un cementerio de chicos?.
- No ningún familiar
El anciano sonrió y dijo: -Puede usted serenarse, no hay tal maldición, lo que pasa es que aquí tenemos una vieja costumbre. Le contaré: cuando un joven cumple 15 años, sus padres le regalan una libreta, como esta que tengo aquí, colgando del cuello, y es tradición entre nosotros que, a partir de allí, cada vez que uno disfruta intensamente de algo, abre la libreta y anota en ella: a la izquierda que fu lo disfrutado…, a la derecha, cuanto tiempo duró ese gozo. ¿ Conoció a su novia y se enamoró de ella? ¿Cuánto tiempo duró esa pasión enorme y el placer de conocerla?…¿Una semana?, dos?, ¿tres semanas  y media?… Y después… la emoción del primer beso, ¿cuánto duró?, ¿El minuto y medio del beso?, ¿Dos días?, ¿Una semana? … ¿y el embarazo o el nacimiento del primer hijo? …, ¿y el casamiento de los amigos…?, ¿y el viaje más deseado…?, ¿y el encuentro con el hermano que vuelve de un país lejano…?¿Cuánto duró el disfrutar de estas situaciones?… ¿horas?, ¿días?… Así vamos anotando en la libreta cada momento, cuando alguien se muere, es nuestra costumbre abrir su libreta y sumar el tiempo de lo disfrutado, para escribirlo sobre su tumba. Porque ese es, para nosotros, el único y verdadero tiempo vivido.